Le pido al destino que me ampare.
Hoy que me encuentro embriagada en confusión,
Con el corazón tranquilo y rendida a las posibilidades,
Le pido al destino que me ampare.
Que no me haga de lado en su agenda.
Que resuelva mis asuntos con la misma sabiduría
Con la misma inconciencia con la que me abrigó estos meses.
Le pido que me deje descansar también.
Que el descanso sea duradero, profundo.
Que me duerma por días en el calor del sol de noviembre
Que me deje respirar.
El destino
Que me ha dado mi lugar
Que me ahorcó por momentos, marcó mi camino por medio del dolor
Del aprendizaje
Del amor.
Me trajo a lugares en los que soñé escribir mi historia.
Que permite escribirla todos los días…
Le pido que se apiade y me abrace,
Me guíe,
Me conduzca a donde siempre quise estar.
《No se donde quiero estar.》
Le pido que una vez más me aloje en los brazos del receso
Tal como lo hizo cuando mi corazón se lo suplicó a gritos
Y con su fuerza paró el mundo.
《Le pido que el mundo pare…
Ahora.
Y me deje dormir.》